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Foto del escritorEl Programa Buenos Aires

36° Fiesta Nacional del Teatro . El teatro que hacemos como forma de identidad

Actualizado: 24 oct 2022

Escribir una fiesta y otros ensayos

Abrir un archivo en blanco como misión. Abrir un archivo en blanco para trazar la línea imaginaria de un recorrido que venga a representar lo vivido durante los seis días en los que nos dispusimos a cubrir la 36 Fiesta Nacional del Teatro - que sucedió del 28 de septiembre al 6 de octubre en la ciudad de Resistencia, Provincia de Chaco. Todo un desafío, que decidimos emprender con entusiasmo. Estas líneas intentarán contarles de esta fiesta que fue de puro aprendizaje y disfrute, y sin lugar a dudas una experiencia más que queremos hacerles llegar. Transmitirles las impresiones de cómo es que esta fiesta contiene a cada provincia hablando del teatro que hacemos, de cómo cada una de las obras, desde su singularidad, su estética y sus tiempos, habla de ese teatro que nos une a todos en cada rincón del país y de la identidad de cada uno de sus lugares de producción.

En esta fiesta organizada por el Instituto Nacional del Teatro, los espectáculos fueron seleccionados en las respectivas Fiestas Provinciales del Teatro por un jurado especializado en cada provincia. También hubo obras invitadas, teniendo como referencia “La diversidad”.

De por sí, es interesante ver a esta fiesta como nómade. Año a año, la fiesta va cambiando de ciudades con el objetivo de que el teatro siga girando y llegando a todos los rincones del país.


Llegamos el sábado, nos dirigimos al stand de acreditaciones, es la primer fiesta que cubrimos con El Programa Buenos Aires, proyecto independiente que nació en el 2018 en el afán de compartir con otros las percepciones que nos generaba el ritual teatral. ¿Qué hacemos con todo lo que nos genera ver una obra de teatro? ¿A dónde van a parar las percepciones, los sentidos que se despiertan al ver una obra que nos fascina, que nos conmueve, que nos modifica? La palabra como puente, como forma de pensar el teatro que hacemos. Compartir el ritual: llegar al teatro, El Programa en mano, la obra, los aplausos. Luego el pensamiento, la palabra, la escritura.


Entrar en el “ritmo” de la fiesta es parte de la experiencia: Llegar, acreditarse: veremos 4 obras por día, cada una de distintas partes del país y sería una sorpresa descubrir las creaciones de cada elenco.

En seis días vimos veintiún espectáculos, muchas provincias y todos ahí reunidos con el mismo objetivo: compartir el teatro que hacemos, el teatro que nos representa desde cada provincia. Ese teatro que viene a conformar una identidad teatral nacional que se refleja de distintas maneras pero que al mismo tiempo es una sola.



Un recorrido posible entre muchos otros

La fiesta duró ocho días y un corredor federal en donde ver obras, shows musicales, espectáculos de todo tipo. Por cuestiones operativas y de recorridos por la ciudad, nos fuimos organizando para ver las siguientes obras teatrales en seis días, la oferta era tan amplia que no llegamos a ver todas las obras que queríamos, pero vimos unas cuantas:


Día 1: Primeras impresiones de sábado por la tarde –1 de Octubre: Mandato cumplido: Obra Mendocina de Diego Amador Nogara, obra que viene a desplegar una fiesta en esta fiesta: La elección de la reina de la vendimia, costumbres locales y espejo de construcciones sociales que se hacen en torno a esa figura y la Fiesta de la Vendimia.

Piel de Cabra: Obra de Buenos Aires de Nicolás Blandi, que hace un mix súper interesante entre el

registro del género terror, la peste, textos clásicos, comedia, los tres chiflados, músicos en vivo, mates y más, desarrollando pensamiento lateral en relación a la peste y al teatro post-pandémico. Hemos reído mucho con las actuaciones de Gabriel Raso y Soledad Bautista.


En categoría de Obras invitadas vimos: Deshojados, obra del Cordobés Ariel Astrada actor ciego que nos muestra en su obra la percepción de otra perspectiva de un cotidiano. ¿Qué se ve cuando no vemos? Propone un despertar y conciencia sobre el registro que hacemos del otro.



Día 2: No hubo depre de domingo - 2 de octubre

Arrancamos la tarde zambulléndonos de lleno en nuestro querido William Shakespeare usando como vehículo la bellísima obra Sueño de la Compañía Criolla de CABA con Dramaturgia y Dirección de Emiliano Dionisi. Nos adentrarnos en el universo de “Sueño de una noche de verano” con cuatro intérpretes que darán que hablar en un registro mixto de teatro, comedia musical y clown, todo en una sola obra. Para reír, disfrutar y seguir el hilo de esta historia tremenda.

Fantasmáticas, obra de la compañía Ciertas Mujeres de Teatro de Arte de La Rioja, escrita por

Tania Leyesen. Tres viejas actrices se exilian en un teatro, atravesadas por la ilusión de que la "gran" obra está por venir. Desde ese lugar, habitan la actuación y la vejez con un registro irónico y nos hacen pensar en qué es lo que la sociedad pretende de nosotros una vez que pasamos cierta edad, desde un lugar combativo. Reímos muchísimo.


Flores Blancas de Natalio Bognani obra de Jujuy, nos conmueve con su unipersonal ubicado en los años 60 en donde vemos con claridad una problemática que nos sigue atravesando: la violencia machista dentro de los hogares. El tiempo transcurre lento al paso de las plantas que crecen en su jardín y subraya la importancia de cambiar un destino.


El Bife, obra de Buenos Aires de M. Ángeles Conde, en la que dos actores vienen a traer como bife la violencia sistemática de una sociedad capitalista. La carne, el hambre, las agresiones y la muerte inminente.


Día 3: Lunes entre Jardines y Mitos - 3 de Octubre


Historia con Flores: obra invitada de títeres de guante de Javier Zalazar, de El Calafate, En la que una niña intenta cuidar sus flores con un cocodrilo como mascota. Obra para las infancias.


Espía a una mujer que se mata: desde La Pampa, Dirigida por Adrián Canale, una obra de Daniel Veronese, sucede en el jardín de la Sala 88 teatro que se transforma en la casa de campo que contiene a seis personajes en un conflicto familiar, celos, deseo, ambiciones, donde se cruzan Chejov, un vermut, desamores y casi, una tragedia.

Ojo de Pombero: de Toto Castiñeiras, CABA. Además de deslumbrarnos con el cruce de lenguajes, con un vestuario e iluminación impresionantes y un enorme trabajo físico de los actores, vino a hacernos salir del lugar de espectadores pasivos, exigiéndonos durante toda la obra pensamiento y análisis. Para pensar el lugar de espectador en el hacer teatral.


Ese día en el que nos encontramos Todos: De Victor Cardozo, Chaco. Una propuesta de drama familiar que deviene misterio, donde una actriz contará su versión de los hechos vividos por toda la familia.




Día 4: Susi Shock , actuar la música y los rituales que reparan un martes - 4 de Octubre

Presentación de libro: Mañana inolvidable con la Presentación de Teatraria, libro de Susy Shock. Es el primer libro publicado por la Editorial INTeatro escrito por una autora trans. Nos fuimos con el registro de la importancia de ser conscientes de toda una historia anterior negada, porque muchas escribieron, pero no todas tuvieron libros publicados. Entender que el teatro brindó un posicionamiento, un lugar desde “el under del under” desde donde contar toda una historia negada. Pensar en todos esos lugares en donde ellas estuvieron, pero no fueron nombradas, en las desapariciones, en los tangos, en tantas historias que hacen omisión, en los libros. El libro como parte de la historia, los libros que hablan y serán parte de nuestra historia: “Vamos siendo” dijo Susy.

Salimos del salón emocionadas. Agradecidas por esta publicación esperando que sea la primera de muchas, reafirmando la importancia de que continúe ésta política de abrazar e imprimir la diversidad.


Paraná Porá desde La Pampa de Maruja Bustamante, con dirección de Claudia Peña. Dos mujeres en un bote, el río congelado. La sensación del fin del mundo sin hogar, casi como un naufragio, donde ellas construirán con su vínculo una forma de salvarse.


Como obra invitada vimos Trópico de Plata de Rubén Sabbadini, función de la cual salimos deslumbradas por la potencia, la poderosa interpretación y la bellísima dramaturgia. Laura Nevole gigante interpretando un texto crudísimo y necesario, dejando leer la contradicción que pueden habitar el amor y la violencia. Impresionante. Trópico de Plata también fue publicada por la Editorial INTeatro.


Llegando la noche, no pudimos ocultar el entusiasmo por ver la obra de Francisco Daniel “Paco” Giménez No soy un Robot, de Córdoba. Esta superó ampliamente nuestras expectativas haciendo de la música teatro y no permitiéndonos dejar de sonreír durante toda la obra, mostrando el lado A y lado B de una persona, como la cara triste y la cara feliz que todos tenemos, como el teatro. Con Rubén Cirigliano en guitarra y Paula Lombardelli en percusión, aunque dividir los roles no hace justicia al cuadro que arman todos juntos en esta obra divina.


Para cerrar la jornada vimos La invocación, obra de Santa Fe, dirigida por Sebastián Roulet, y María Flavia del Rosso. Nos hizo recordar con algunos guiños fragmentos de nuestro pasado, mundiales, dictaduras, El Diego y momentos violentos a nivel país. Todo de la mano de un vendedor ambulante, una desaparición y un gran descubrimiento: la radio.


Día 5: La luz del teatro que hacemos: Miércoles 5 de Octubre

Un Par: espectáculo de Mendoza de Adrián Hernandez y José Agüero, orientado para las infancias, que atrae también al público adulto, en donde el mensaje de compartir y la empatía prevalecen ante todo. De una belleza poética y ternura que dio gusto presenciar.


La catamarqueña Brisas en la siesta, dirigida por Sandra Martínez y Roxana Castro, vino a recordar los ratos de siesta del interior del país con risas y emoción y la nostalgia de aquellos tiempos sin celulares donde los cuentos y canciones con guitarra eran los protagonistas de los días y las noches, con algunos guiños al Chavo del Ocho.



Piel y Huesos desde San Luis, dirigida por Mabel Dai Chee Chang. Una obra de danza teatro, donde la imagen es poderosa. Imprimiendo en la retina del espectador figuras extra cotidianas despertando los sentidos en relación a la mirada sobre los cuerpos, las ciudades, los desechos, el fin del mundo y la muerte.


Para cerrar la jornada vimos Los Cielos de la diabla, dramaturgia y actuación de Vilma Echeverría. Ella lava las camisetas del Club Atlético Independiente y se convierte en La Diabla. Además de ser un unipersonal espectacular con una puesta bellísima, quedó registrada en nuestra memoria como una de esas obras y experiencias que recordaremos para toda la vida: se hizo la luz, incluso con corte total de energía y luz de emergencia, para encender y dar vida al ritual del teatro. Un público fascinado y una actriz deslumbrante. Doble I para esta obra: Imperdible e Inolvidable.





Día 6: El poder de la naturaleza un día Jueves - 6 de Octubre


Diluvio desde Santa Cruz, de Mario Canales. Obra que paradójicamente se suspendió por lluvia el día anterior y que Sandro y Domingo vinieron a interpretar desde Puerto Deseado. Dos hombres a la espera, un fuego que cuesta mantener vivo, y la esperanza de algo que vendrá.


Para cerrar la gira teatral de esta fiesta, vimos Paraíso Elemental de Luisa Ginevro, obra/instalación Mendocina que no hizo más que captar nuestra atención desde el inicio. Piel de gallina, emoción hasta las lágrimas para culminar con un cartel de Basta de Extractivismo. Una bomba de poesía y de sentido. Conmovedora, combativa y necesaria.


Luego del ritual, la palabra y el encuentro

Hubo diariamente un encuentro matutino de once a una de la tarde en donde periodistas, elencos y públicos nos encontramos para dialogar y compartir percepciones sobre las obras. Un espacio enriquecedor que nos permitió conectar con el hacer teatral: ¿cómo surgió la idea de las obras? ¿cómo se plasmaron esas ideas? ¿cuáles fueron los procesos? ¿los ensayos? ¿cuáles son las necesidades de los elencos? Algo de ese espacio, del compartir la experiencia nos hace tener un registro de eso que nos convoca, ese sentido de pertenencia a esta disciplina que a todos nos une. El teatro dando nombre a sus partes con preguntas, reflexiones, cuestionamientos, necesidades, intrigas sobre el futuro y sobre el propio espacio de reflexión. Una instancia para escuchar a todas las voces y en donde seguir pensándonos como hacedores de cultura.


Libros para todxs

Además de las presentaciones de libros y el homenaje a Carlos Pacheco por los 20 años de la Editorial INTeatro, en el área central de La casa de Las Culturas, contamos con la presencia constante del stand de Editorial INTeatro en donde se iban renovando estanterías con los ejemplares publicados en 2022, así como también ejemplares de otros años. Cada persona podía hacer una elección de distintos títulos para lectura. En mano tenemos ejemplares de Éxodo. Ensayo sobre la masculinidad de Federico Polleri, Los Cielos Encima de Jazmín Garcia Sathicq, Monotonía (Viceversa) de Diego Bernachi, Trópico de Plata de Rubén Sabadini, Tetraria de Susy Shock y dos ejemplares de Picadero Cuadernos: Teatro, género y Políticas Queer de Juan Ignacio Crespo y El Desmontaje teatral de Inés Ibarra.

Clara es la importancia de las publicaciones y la voluntad de mantener la presencia del libro físico como acto político, cosa que no es menor en estos tiempos de inmediatez y bits. Calidad, gratuidad y accesibilidad. Aplausos.


Pensar la difusión: otra forma de diversidad

Nos resultó particularmente interesante pensar las nuevas formas de difusión en esta fiesta teatral, dado que el lema de este año era la diversidad. Además de incluirse a los medios tradicionales de difusión como lo son los diarios más importantes del país, radios, etc; también se incluyó a medios de difusión no tradicionales, como youtubers, instagramers e influencers y toda una nueva camada de prensa entre los que entramos nosotras, entre otros, como medio alternativo de difusión de teatro. Pensar al teatro como algo en constante movimiento e incluir dentro de esa idea a las nuevas formas de difusión, habla de una voluntad de ganar territorio sobre nuevas generaciones que utilizan medios no tradicionales para informarse o para consumir contenidos que los vinculan con el teatro. El dilema quizás sea encontrar la forma de utilizar los medios tecnológicos que por prejuicio podrían llegar a atentar contra el consumo de teatro y usarlos a favor para incentivar desde esos mismos medios el “ir al teatro”. Usar lo digital y lo virtual como motor para impulsar la presencia de esos mismos cuerpos y mentes en el teatro. Allá vamos.


Conclusiones a flor de piel

Seis días inmersos en la escena teatral de todo el país. Seis días interactuando y descubriendo los temas, las preocupaciones, las ganas de hacer teatro, los regionalismos, los rituales de cada lugar. Cada provincia con sus características, sus tiempos, sus preferencias de forma. Cada obra habla de un lugar en el que surge, habla de costumbres, de contextos de producción, de problemáticas que aquejan, de formas de actuación, de registros, de pensamientos. Cada obra habla, dice, comunica, silencia, deja leer entre líneas. Cada obra es. Es expresión de deseo. Es expresión de un quehacer teatral que nos habita a todxs, a cada unx de los que estuvimos ahí y a cada unx de los que desde su lugar en el país hacen, hablan, construyen y piensan en teatro.

El teatro que hacemos, el teatro que nos une, parece tan distinto y tan igual al mismo tiempo. Un teatro que nos convoca a querer transformarnos, a querer seguir haciendo y a querer seguir transformándolo, aggiornándolo y haciéndolo más inclusivo.

Esta fiesta viene a traer como premisa la diversidad. Hablar de diversidad, de inclusión, es hablar de un teatro federal que nos une, sin importar las dificultades, las diferencias que podamos tener tanto en las formas de creación como en el resultado estilístico. Haciendo teatro, viendo teatro y celebrando también las políticas que lo hacen posible. El hacer teatral como bandera.


Salimos de esta fiesta totalmente transformadas. Porque estar dentro de la escena federal, estar dentro de esa gran ola de teatro argentino, latinoamericano, no es cosa de la que somos tan conscientes todos los días. Verlo, reírlo, llorarlo, percibirlo, aplaudirlo y celebrarlo, eso sí que es poner el cuerpo. Eso sí que es también ser conscientes de que al teatro lo hacemos entre todxs y de que para hacerlo hay que pensarlo, sentirlo, actuarlo, bailarlo, escribirlo, reseñarlo y por supuesto, no dejar que nunca muera.

36° Fiesta Nacional del Teatro. Resistencia. Argentina. ¡Que viva la fiesta! ¡que viva el teatro!

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